martes, 9 de abril de 2013

Masaje Shantala, lo que necesitas saber.


El masaje shantala es un contacto especial entre la madre y el bebé ,la eficacia de este tipo de masaje infantil no sólo radica en el tacto, sino también en el contacto y en los beneficios que genera: “El contacto de la mano humana en el cuerpo del bebé pone en movimiento corrientes neuronales que estimulan el Sistema Nervioso Central (SNC) y si esa mano es, además, la de su mamá todo es especial”.
Dentro de los beneficios de esta técnica tambien favorece la maduración de los sistemas respiratorio y digestivo, el alivio de cólicos y la predisposición al buen descanso.
Estudios realizados en una neonatología han comprobado que  los bebés que nacieron con algún problema de salud y reciben masaje shantala en los servicios se recuperan más rápido.
El masaje Shantala se dispone de un ratito a estar con atención exclusiva y disponibilidad en el bebé. Lo ideal es comenzar el masaje shantala a partir del primer mes de vida, aunque siempre se deberá contar con la aprobación del pediatra, quienes, cada vez más recomiendan masajes como parte de la rutina del bebe.
La rutina ideal para el bebé sería el masaje Shantala, baño, comida y a dormir, este orden propiciaría la relajación del bebé para lograr por las noches un mejor descanso.

 

BENEFICIOS DE LOS MASAJES SHANTALA:
* Disminuir el estrés, gracias a la secreción de cierta hormona durante el masaje, además a liberar tenciones y ansiedad.
* Ayuda a que el bebé tenga un sueño tranquilo y profundo, combatiendo el insomnio y las pesadillas, además hace que los bebés lloren menos.
* Desarrollar los sentidos y la motricidad (a desarrollar una conciencia y coordinación de su cuerpo).
* Ayuda a regular y reforzar las funciones respiratoria, circulatoria y gastrointestinal. A través de la estimulación, se puede controlar las incomodidades producidas por los cólicos, gases y estreñimiento, y las molestias por la salida de los primeros dientes.
* Ayuda a intensificar la comunicación afectiva entre el bebé y las personas de su entorno, facilitando la comunicación no verbal. A aumentar el contacto afectivo del bebé con sus padres a través del toque, la mirada, de la piel, de la sonrisa, sonidos, abrazos, caricias, olor, y de los estímulos.
* Ayuda a estimular el sistema inmunológico y propicia un mejor desarrollo del sistema nervioso, y l iberar sustancias bioquímicas que logran aumentar el apetito.
* Ayuda a aumentar la auto-estima del bebé.
* Adquiere ritmos y rutinas.
* Tonifica y fortalece los músculos
* Mejora la adaptación e incentiva la inteligencia
* Ayuda a que un bebé prematuro aumente de peso y se recupere lo suficiente para reducir su propio período de hospitalización
* *Produce avances físicos en los casos de niños con necesidades especiales.
* El masaje transforma el bebé en un bebé saludable en todos los aspectos.

¿Cómo realizarle los masajes?

recomendaciones para aplicar el masaje shantala:
* Trate de sentir si usted realmente quiere masajear a su bebé, pues no se trata sólo de aplicar una técnica, sino de buscar un nuevo tipo de contacto con esa vida que se inicia.
* Este masaje está recomendado para después de que el bebé cumpla un mes y puede ser practicado hasta la edad pre-escolar.
* El masaje se puede efectuar al sol (hasta las 10 de la mañana) o en el dormitorio con una temperatura cálida, para que él bebé no sienta frío, ya que debe estar totalmente desnuda.
* No haga el masaje cuando el bebé se encuentre resfriado o con fiebre, porque éste activa la circulación, y puede aumentar la temperatura. Tampoco lo haga si está con diarrea ya que el efecto relajante puede intensificar ese estado.

* Respete el ritmo del bebé, haciendo e l masaje en el horario más adecuado a su rutina. Evite realizarlo cuando el bebé esté con hambre o inmediatamente después de haberlo alimentado.
* Cuando es aplicado en la temprana infancia, el masaje puede proveer una base promotora de salud a lo largo de la vida. Los bebés que son privados del contacto con sus madres, usualmente carecen de habilidades sociales y son más propensos a enfermarse.
Los masajes se darán con aceites para bebes, con movimientos muy suaves.
El pecho: desde los hombros, luego se toma el vientre y todo el pecho. Los movimientos de los masajes es la barriga a veces son circulares. En el pecho hay movimientos lineales, como si se estuviera abriendo y aislando desde el esternón hacia los hombros.
BRAZOS: desde los hombros hasta las muñecas y las manos, llegando hasta los dedos y sus yema. Generalmente se trabaja en forma de anillos, como haciendo pequeños torniquetes, donde una mano toma y gira para un lado y la otra sujeta más abajo y gira suavemente para el otro.
PIERNAS: desde las ingles pasando por las rodillas, llegando hasta los tobillos, las plantas, los dedos y las yemitas de los dedos, con movimientos laterales y lineales.
ESPALDA: en forma de zigzag, desde los hombros hasta los glúteos. También desde los hombros hasta los pies, con movimientos hacia abajo, deslizando.
La mamá sostiene al bebé por las axilas para comprobar su respuesta al reflejo de enderezamiento. El bebé estira el cuerpo desde las rodillas hasta la cabeza.
Las piernas: Poner las manos de mamá o de papá en una de las piernas. Una por arriba y otra por debajo, formando pequeños brazaletes, que se apoderan del músculo y, la una después de la otra, suben a lo largo del miembro, hacia el pie del bebé. Después, actuando en sentido opuesto sus manos (siempre rodeando la
extremidad del niño) subirá desde la base de la pierna hacia el pie, efectuando el movimiento de torsión como si exprimieran.
No olvidar que el talón es una región esencial. Finalmente masajeará la planta del pie, primero con los pulgares y después con toda la palma de la mano. Y, naturalmente, cuando haya terminado con una de las piernas pasa a la otra.
Tomarlo de las rodillas, por debajo, llevárselas al pecho en vaivén, despegar la columna del suelo y luego aflojar con el cuerpo todo estirado y apoyado sobre la colchoneta.

El vientre: Aquí sus manos trabajan una después de la otra. Partiendo de la base del pecho, allí donde se abren las costillas, descienden hacia la parte baja del vientre.
En suma, usted trae sus manos una después de otra hacia usted misma.
Perpendiculares al cuerpo del bebé, sus manos aquí trabajan planas.
Una vez más, se suceden como olas, como si vaciaran el cuerpo del bebé.
Los pies: Al presionar el centro de la planta del pie, el recien nacido encoje los dedos y se agarra con fuerza al pulgar.

Se realizarán movimientos envolventes de forma muy suave, tocando la piel del bebé o moviendo los músculos con mucho cuidado. Se utilizarán los dedos índice y corazón y se harán “ochos”. En las partes de difícil acceso (parte anterior del cuello) utilizar las yemas de los dedos. En la espalda o estómago se utilizarán los dedos o la palma de la mano.

OTROS MASAJES, PROCEDIMIENTOS:
Lo primero, sentados en el suelo con las piernas estiradas, las espaldas rectas y los hombros relajados, cubriremos nuestras piernas con una toalla o la mantita del bebé. Cogeremos el niño/a desnudo/a y lo tumbaremos sobre la toalla en una posición en que ambos podamos mirarnos. Untaremos nuestras manos con un aceite natural o crema para bebés y dedicaremos un minuto a mirarle. Luego, empezaremos el masaje.
Orientaciones:
1- Hacer movimientos con firmeza, siempre de dentro para fuera y del centro para las extremidades o de abajo para arriba. Del lado izquierdo al derecho, y a un ritmo lento y constante, moderando la presión de los dedos según la zona.
2- Empezar por el pecho. Deslizar las manos del centro para los lados. Primero el izquierdo y después el derecho.
3- Después del pecho, masajear sus brazos, girando al bebé de lado, sujetándolo por el hombro y haciendo movimientos ( con la otra mano) del hombro hacia el pulso, manteniendo siempre un ritmo constante.
4- Masajear las manos, estirando suavemente cada dedito. Y lo mismo con los pies y sus deditos.
5- Situar una de nuestras manos a la altura del estómago del bebé y deslizarla bajando en dirección a la tripita como si estuviera vaciándola. Alternar los movimientos con una y con otra mano. Si el bebé tiene problemas de gases, ese masaje le ayudará a eliminarlos.
6- Si el bebé no es demasiado pequeño, dar la vuelta a su cuerpo y darle un masaje en la espalda, siempre de parte central a las laterales. Él lo agradecerá con balbuceos y grititos.
Importante: el masaje solamente debe ser evitado cuando el bebé esté con fiebre, gripe, o con alguna infección. Y si todavía es de pecho, solamente se masajeará después de darle leche.
Es necesario saber respetar los deseos y la disponibilidad del bebé y también de sus padres. Habrá días que, por alguna razón, el bebé no se muestre muy disponible al masaje. Del mismo modo que el padre o la madre. En este caso, no se debe insistir. Si los padres no están relajados lo suficiente para dar el masaje al bebé, mejor que no insista en ello. El bebé lo percibirá y puede que no se relaje como debería. Así que lo mejor es sustituir este momento del masaje por otra actividad que no necesite tanta concentración, como cantar canciones infantiles, o leer un cuento, etc.